100 gramos de pollo.
1/2 cebolla.
Jugo del pollo.
2 cucharaditas de harina.
1/2 vaso de leche.
1 cucharada de aceite.
Sal.
1 huevo.
Pan rallado.
Preparación:
¿Que nos ha sobrado pollo de haberlo asado el día anterior o del cocido?, pues bien, desmenuzamos la pieza de pollo y troceamos en pedazos muy pequeñitos.
Troceamos muy finamente media cebolla o una entera dependiendo del tamaño, que sofreiremos en una cucharada de aceite, cuando la cebolla empiece a pocharse añadimos el pollo desmenuzado y revolvemos bien para que siga friendose, entonces añadimos unas dos cucharadas de jugo del pollo asado y seguimos revolviendo hasta que se consuma.
Añadimos dos cucharaditas de harina y removemos con una cuchara de madera para que no se queme la harina y se haga bien.
Vamos añadiendo leche poco a poco y removiendo para que se vaya formando una pasta. Removemos durante 5-7 minutos hasta que la masa quede compacta y se separe del fondo de la sartén.
La masa tendremos que dejarla enfriar un mínimo de 3 horas.
Una vez asentada la masa, nos ayudamos de una cuchara para dar forma a las croquetas. Las pasamos por un huevo que habremos batido anteriormente y pan rallado.
Añadir aceite en una sartén y freir las croquetas, que se quedarán crujientes por fuera y cremosas por dentro.
Y a la mesa...Nota: Se puede añadir jamón troceado, al gusto.
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