1 patata.
1 cebolla mediana.
2 dientes de ajo.
1 chorizo.
2 titas de panceta sin ahumar.
3 cucharadas de harina de almortas.
Una pizca de pimentón.
2 vasos y medio de agua.
Aceite.
Sal.
Preparación:
Se pela y corta en láminas finas la patata (como para tortilla).
En una sartén honda se añaden dos cucharadas de aceite y cuando este caliente se añaden las patatas. Una vez hechas se apartan.
En una sartén honda se añaden dos cucharadas de aceite y cuando este caliente se añaden las patatas. Una vez hechas se apartan.
Pelamos y cortamos la cebolla en trocitos pequeños, el ajo se pica y todo ello se añade al aceite utilizado anteriormente para dorar las patatas.
Cuando la cebolla y el ajo vayan cogiendo color se añaden el chorizo y la panceta en trocitos pequeños. Movemos y dejamos 3-4 minutos para que se vaya haciendo.
Cuando la cebolla y el ajo vayan cogiendo color se añaden el chorizo y la panceta en trocitos pequeños. Movemos y dejamos 3-4 minutos para que se vaya haciendo.
Una vez hecho el chorizo y la panceta añadimos tres cucharadas de harina de almortas y la punta de un cuchillo de pimentón, con el fuego mas bajo no paramos de remover para que la harina no se queme.
A continuación le damos fuerza al fuego y vamos añadiendo el agua progresivamente sin dejar de remover. Antes de que termine de espesar añadimos las patatas que antes habíamos apartado y seguimos moviendo continuamente durante al menos 18-20 minutos.
Cuando hayamos obtenido el espesor deseado las apartamos y dejamos reposar un par de minutos. Aquí el cocinero, en esta ocasión mi padre, probando la ricas Gachas del tío Paco.
...Y a la mesa.
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